Poco a poco, nuevas herramientas y sitios web van apareciendo para crear novedades en el entorno ecommerce. Estos presentan una alternativa válida frente a Amazon y a otros canales de comercio electrónico que se han convertido en habituales.
Por ejemplo, Google ha lanzado recientemente Google Shopping Action. Su operativa es muy sencilla: se realiza la búsqueda de un producto y se tiene la posibilidad de añadirlo, directamente desde el buscador, a una cesta de la compra. Para ello se debe acceder a Google, buscar un producto y a través de Google Shooping, aparece un listado de productos y precios que redirigen a las tiendas online donde se comercializan. Con esta nueva opción, los compradores buscan un producto y directamente efectúan la compra. Este servicio está solamente disponible en EEUU y Francia. Walmart Inc. ya está haciendo uso de esta nueva funcionalidad.
Google, además, ha lanzado esta nueva opción enlazada con diferentes herramientas y funcionalidades de las que dispone el gigante de las búsquedas para hacer la compra online aún más cómoda y ágil. Por ejemplo, con Google Assistant, la herramienta de búsqueda por voz presente en más de 400 millones de dispositivos en todo el mundo. Google Assistant ayuda al cliente a encontrar el producto que necesita y Google Shopping Actions permite añadirlo fácilmente al carrito propio de Google. Para recibir el producto en casa, el cliente dispone de Google Express. De este modo Google también cubre el envío del producto y es otro ejemplo de esta interconexión entre los servicios que ofrece Google. Finalmente, y para ponerlo todavía más fácil, el cliente dispone de una tarjeta llamada Google Express card, donde tiene guardadas las credenciales de pago.
Así pues, hoy en día un ciudadano de Estados Unidos puede comprar un detergente simplemente pronunciando 3 frases:
A las empresas esto les puede ayudar a: llegar a nuevos clientes y que estos accedan fácilmente al producto. Este sistema ofrece mayores facilidades para realizar compras online, ya que no hay necesidad de registrarse. Es tan sencillo como realizar la búsqueda del producto que se necesita y desde el mismo resultado se añade al carro y se efectúa la compra. Google hace un seguimiento de cada venta y, a final de mes, envía a la empresa minorista una factura, puesto que Google Shopping se sustenta en un modelo de Coste por venta (CPS): si no hay venta, no se recurre a ningún coste.
Todas aquellas empresas que tengan tienda online pueden vender en Google Shopping Action y los compradores pueden acceder a la herramienta desde 3 vías diferentes:
- En la web o aplicación para móvil de Google Express (parecido a Amazon Prime Now)
- Búsqueda en Google
- Búsqueda por voz vía Google Assitant (en teléfonos móvil o dispositivos domésticos inteligentes)
Google Shoppable Ads es todavía un servicio más novedoso: una opción similar a la que recientemente tienen Instagram o Pinterest. Se anunció el pasado mes de marzo en la feria Shoptalk, en Las Vegas, y el objetivo es convertir Google Imágenes en una especie de tienda online. Para ello, se pretende ofrecer a las empresas etiquetar productos en las fotos que aparecen en su buscador para “permitir a los minoristas llegar a los compradores en la fase de inspiración de las compras”. Según datos propios de Google, el 50% de los compradores online realizan una adquisición tras ver el producto en una imagen. De esta forma cuando se pasa el ratón por encima de las imágenes patrocinadas, se puede visualizar la marca, el precio y otros detalles del propio producto. Además, permite enlazar la compra directamente en la tienda del retailer.
Por último, Instagram, la red social con alrededor de 1.000 millones de usuarios, ofrece por su parte la posibilidad de etiquetar productos en sus publicaciones. Esto permite comprar el producto directamente en la web de la marca, sin necesidad de tener que buscarlo. Para las empresas, etiquetar un producto es como etiquetar a una persona en una publicación y para los compradores significa tener acceso directo a la información del producto etiquetado. Esta funcionalidad ha tenido un gran éxito en Estados Unidos, creando más tráfico en la web de los vendedores y un aumento también de las ventas. Con ello, Instagram se está convirtiendo en un lugar al que la gente acude para descubrir nuevas marcas y productos.