Tener presencia online es indispensable para cualquier empresa, sin importar su tamaño. Actualmente, es clave contar el mejor contenido para generar un gran volumen de tráfico y convertir una visita en un cliente fiel. Una información clara, relevante y atractiva es lo que impulsa a un cliente potencial a realizar una compra. Cuanto más contenido online se cree, se tendrá mayor potencial para atraer clientes.
Aun así, atraer tráfico, generar clientes y fidelizarlos no es una ciencia exacta. Lo importante es crear un plan definido, que permita ser creativo, constante, honesto y adaptable. Si se mantienen estas sencillas premisas, sumando tiempo y paciencia, es muy probable que se puedan ver los frutos del esfuerzo que conlleva.
Nadie conoce mejor a su cliente/usuario que la propia empresa. Con ellos en mente, se deben crear contenidos de calidad. Para ello, es importante tener en cuenta una serie de elementos y consideraciones determinadas.
- Marcar un objetivo claro. Definir lo que se quiere comunicar y el resultado deseado que se busca o se quiere cumplir con el contenido, siempre teniendo presente al cliente o público objetivo al que se dirige.
- Empezar por el título. Es lo primero que se verá en la búsqueda, y si es atractivo, concreto y llama la atención es muy probable que la persona que este navegando en la red entre en la página. Hay que tener en cuenta también las palabras clave que ayudarán en el SEO. Incluir palabras clave para la búsqueda es importante para salir entre los primeros resultados en la búsqueda.
- Estructurar el contenido. Tras el título, viene el contenido y se debe organizar de forma coherente y que sea de fácil lectura. Hay que tener cuidado siempre con la redacción y la ortografía. Los textos deben tener una buena redacción y una estructura clara. Se empieza por la información más importante o básica y a partir de aquí se va añadiendo la información secundaria o menos relevante sobre el producto o servicio.
- Utilizar distintos formatos. En la medida de lo posible, hay que incorporar información multimedia en el contenido (fotos, videos, etc.). Combinando texto con otros formatos de contenido se enriquece lo que se comunica, y se ofrece una historia mucha más atractiva e interesante. Los textos muchas veces pueden ser aburridos y tediosos si se abusa de ellos.
- Ser creativo y original. El contenido debe ser propio y no una copia de otros portales, páginas, etc. Tú eres el que sabe cómo transmitir tu historia, no dejes que otros la cuenten por ti. Además, si el contenido es similar a otras páginas, penalizará en la generación de tráfico hacia la web.
- Por último, pero no menos importante, el diseño. Se debe mantener la coherencia a lo largo de todo el contenido: colores, fuente de letra, tamaño, etc. Un contenido con diferentes formatos da la impresión de dejadez y falta de profesionalidad. Esto comunica que no importa mucho el cliente o, por lo menos, no los que llegan a través de la red.
Y recuerda, no tomes nada por sentado, aporta toda la información que puedas sobre tu producto o servicio, no todo el mundo es experto en lo que ofreces.